Una forma genial de renovar tu armario es con aplicaciones bordadas, así puedes ahorrar dinero en ropa y practicar tu hobby al mismo tiempo ^^. Aprende que es el slow fashion y a personalizar tu ropa, ahorrar, y reciclar con esta guía práctica y creativa.
Hace un tiempo me di cuenta de que tenía el armario lleno de ropa, pero siempre acabo poniéndome lo mismo ¿no te pasa a ti también? Compramos, compramos y acumulamos ropa y, sin embargo, muchas veces sentimos que no tenemos nada que ponernos. Buscando por internet encontré un nuevo concepto de moda que no conocía, el slow fashion, por lo visto es lo contrario del fast fashion (ese si lo conozco), y consiste en centrarse en prendas de ropa hechas para durar.
El problema que le veo a este nuevo concepto (al menos es nuevo para mí), es que son prendas más caras, lo cual es lógico porque para que la ropa dure tiene que estar hecha de material de calidad, y que son más «aburridas». Digo aburridas porque suelen ser piezas básicas de armario que van a durar varias temporadas y, por eso, se alejan bastante de las típicas modas que van cambiando cada año.
Así que, como no me puedo permitir renovar el armario con prendas caras por muy buena calidad que tengan y, a veces, me gusta usar prendas que se salgan un poco de lo básico, lo que he decidido hacer es dar una nueva vida a la ropa que casi nunca me pongo con bordados, adornos, etc….en lugar de descartarla y comprar ropa nueva. Y la verdad es que me está gustando este nuevo hobby.
Si que me gustaría algún día tener un armario slow fashion, la verdad, pero es algo que tendré que hacer poquito a poco y, mientras tanto, puedo ir alargando la vida de la ropa que ya tengo.
Hay muchas ideas que podemos usar una vez que decidimos transformar nuestra ropa. Una camiseta básica se transforma en una pieza única con unas flores en el hombro, unos vaqueros desgastados pueden tener una nueva vida con un bordado en el bolsillo… no hace falta transformar la ropa completamente, un pequeño detalle aquí y allá es suficiente para que tu ropa parezca otra
Un poco de historia: de la costura tradicional al slow fashion
Si lo piensas bien, el slow fashion no es algo nuevo. Hace apenas unas décadas, nuestras abuelas ya vivían de manera parecida, se cosían su propia ropa, arreglaban los rotos, aprovechaban los retales y personalizaban las prendas para darles más vida. La moda rápida llegó mucho después, con la industrialización y la producción masiva de ropa barata.
El problema es que este nuevo modelo de consumo ha traído consecuencias bastante graves, como la explotación laboral, toneladas de residuos textiles de la ropa que se desecha cada año, y un impacto medioambiental enorme. Frente a eso, el slow fashion nos invita a volver a lo esencial, a reconectar con la idea de que la ropa tiene valor, y no podemos estar tirando y comprando tanta ropa cada año.
Creo que el bordado, que siempre ha estado ligado a la paciencia y a la artesanía, encaja a la perfección con esta filosofía. Bordar tu ropa es un gesto que se aleja de la prisa y abraza la calma. Es, de alguna manera, un puente entre lo antiguo y lo moderno.
Bordar una prenda no es simplemente decorarla, sino que le estás dedicando tiempo, cariño y creatividad. Creo que así consigues que tu ropa te vuelva a gustar y la luces con un poquito de orgullo por tu trabajo.
Es muy probable que tengas prendas que casi nunca usas porque te parecen aburridas o demasiado sencillas, igual que me pasa a mí. Pero con un toque bordado puedes rescatarlas y sentir que estrenas algo nuevo, sin necesidad de comprar nada.
Lo bonito del bordado es que cada pieza se convierte en única. Nadie más tendrá una prenda igual que la tuya y, además, es más sostenible, porque aprovechas lo que ya tienes. También te sirve de terapia, porque bordar relaja, ayuda a concentrarte y a reducir el estrés (al menos en mi caso es así). Y, por si fuera poco, es económico: con unos hilos y una aguja puedes hacer auténtica magia.
Tabla comparativa: fast fashion vs slow fashion con bordado
| Aspecto | Fast Fashion | Slow Fashion con bordado |
|---|---|---|
| Producción | Masiva, rápida, despersonalizada | Artesanal, consciente, personal |
| Durabilidad | Baja, prendas que duran poco | Alta, ropa cuidada y renovada |
| Originalidad | Miles de copias iguales | Cada prenda es única |
| Impacto ambiental | Muy alto | Mucho menor |
| Relación emocional | Distante, se desecha fácil | Cercana, la prenda cuenta tu historia |
Ideas para bordar y personalizar tu ropa
Aquí van algunas propuestas sencillas y creativas que puedes poner en práctica para renovar tu armario, a ver qué te parecen:
Bordar flores en camisetas básicas
Creo que esto es lo primero que se nos ocurre a todas. Unas margaritas en el hombro, o una ramita con florecillas en un bolsillo son suficientes para dar una nueva vida a una camiseta sencilla. No supone mucho trabajo y creo que puede quedar muy mono.
Renovar tus vaqueros
Añade bordados en los bolsillos traseros, en las rodillas o en los bajos. Los vaqueros bordados tienen un aire bohemio que nunca pasa de moda, aunque esta idea es mejor si tienes máquina de coser, si no, puede ser un poco más trabajoso.
Dale otro estilo a tus chaquetas
En la espalda de una chaqueta vaquera, o de lino, puedes bordar un diseño grande y convertirla así en la prenda más llamativa de tu armario. Si ese no es tu estilo, puedes cambiar los botones, o aplicar un pequeño bordado en los puños.
Bolsos y mochilas
Un pequeño bordado en la solapa de un bolso, o en el bolsillo de una mochila transforma cualquier accesorio corriente en algo especial. Si no te atreves a empezar bordando tu ropa por si la estropeas, puedes empezar con tus bolsos o mochilas viejos, seguro que cuando veas el resultado querrás empezar a renovar tus camisetas ^^
Toques discretos
Si no te gustan los bordados grandes, puedes probar bordando sólo unas iniciales, pequeños corazones o estrellas en zonas discretas de la prenda, como los puños o el borde de los bolsillos.
Bordado visible de reparación
Si tienes un agujero o mancha en una prenda, cúbrelo con un bordado creativo. Lo que antes era un defecto se convierte en un detalle artístico.
Cómo empezar: materiales básicos
Para empezar a bordar tu ropa no necesitas mucho. Si ya bordas en casa como hobby no tines comprar nada, con unas agujas de bordado, hilos de algodón mouliné o perlé, un bastidor para tensar la tela, unas tijeras pequeñas y un lápiz o papel soluble para transferir el diseño ya lo tienes todo. Lo único que necesitas es decidir por qué prenda vas a empezar y qué le vas a hacer, pero eso ya queda a tu elección.
Ejercicios prácticos para principiantes
Si nunca has bordado sobre ropa, aquí tienes un plan sencillo para empezar que es el que yo he usado:
- Escoge una camiseta de algodón vieja, o cualquier otra prenda que quieras renovar.
- Dibuja una forma pequeña y sencilla, como una estrella o una flor. Yo hice una pequeña margarita en la manga.
- Usa punto pespunte o punto atrás para delinear.
- Si te animas, rellénala con punto satinado, o la puedes dejar sin rellenar, a tu gusto.
- Lava la prenda a mano y verás cómo el bordado resiste y tu camiseta parece otra ^^
Conforme vayas renovando prendas y cogiendo confianza puedes probar con vaqueros, bolsos o chaquetas. Yo estoy ahora mismo en plena renovación de mis camisas viejas, un detalle en el cuello por aquí, un dibujo simétrico en los puños por allá….de momento estoy bastante contenta.
Consejos prácticos para bordar tu ropa
Según mi experiencia es mejor empezar siempre con prendas de algodón, porque son más fáciles de trabajar que los tejidos elásticos.
Usa hilos de calidad para que el bordado aguante bien los lavados y puedas usar tu ropa mucho tiempo, que es lo que queremos. Si la tela es muy fina, puedes reforzar el bordado con entretela.
Y, lo más importante, lava a mano tus prendas bordadas para conservarlas en buen estado.
Cómo conservar tu ropa bordada
Si quieres que tus prendas bordadas duren muchos años, cuídalas con mimo. Lávalas con agua fría y jabón suave, es mejor evitar la lavadora y la secadora, y secarlas siempre al aire y sobre una superficie plana. A la hora de planchar, hazlo del revés, y colocando un paño encima para proteger los hilos. Si esto te parece mucho trabajo siempre las puedes llevar a una tintorería, no son tan caras y creo que merece la pena para conservar nuestras pequeñas obras de arte.
Preguntas frecuentes
Qué pasa si me equivoco al bordar
Pues no pasa nada, no te preocupes, todas nos equivocamos. Sólo tienes que deshacer la puntada con cuidado y volver a empezar. Al fin y al cabo estamos renovando prendas que íbamos a descartar.
Qué pasa si la prenda es elástica
También puedes bordarla, pero es recomendable reforzar la tela con entretela para que no se deforme. En estos casos la máquina de coser puede ser una gran aliada.
Se puede lavar la ropa bordada en la lavadora
Lo mejor es lavarla a mano. Pero si decides usar la lavadora, mete la prenda en una bolsa de tela, de esas que venden para la ropa interior, y selecciona un programa delicado.
Qué hilos son los mejores
El algodón mouliné es muy versátil, pero también puedes usar lana fina o hilos metálicos, si buscas un efecto especial. Al final, el mejor material es el que te de el resultado que estás buscando.
Cuánto tiempo tarda en bordarse una prenda
Depende del diseño. Un bordado pequeño se puede hacer en una tarde, mientras que uno grande puede llevar varios días. Creo que mientras disfrutes del proceso y el resultado, el tiempo que te lleve es lo de menos.
Mi experiencia con el slow fashion y el bordado
Bueno, como te he dicho al principio, descubrí esta nueva tendencia por casualidad, y cuando empecé a bordar mi ropa lo hice por curiosidad, pero lo que no esperaba era el cambio que iba a provocar en mi forma de consumir moda.
Ya no siento la necesidad de comprar cada vez que veo algo bonito, porque sé que con aguja e hilo puedo transformar cualquier prenda de mi armario en algo todavía más especial.
Además, cada bordado se convierte en un recuerdo. Una camiseta con flores que hice un verano, unos vaqueros bordados que terminé en vacaciones, incluso he bordado algunas prendas para regalar que han gustado mucho (o eso me han dicho). Y eso, amiga, no te lo da ninguna tienda.
Pienso que el slow fashion no es una tendencia pasajera, es una forma de vivir la moda de manera consciente, sostenible y creativa, como se hacía hace muchos años. Y creo que el bordado puede ser un gran aliado para llevarlo a la práctica.
Con cada puntada no sólo decoras una prenda, también le das valor, la haces tuya y reduces el consumo innecesario. Al final, bordar tu ropa es mucho más que un gesto creativo, es un acto de amor hacia ti, hacia tu armario y hacia el planeta.
Ahora me encantaría saber tu opinión. ¿Te animas a probar el slow fashion usando el bordado? ¿Qué prenda rescatarías de tu armario para transformarla? Déjamelo en los comentarios, me encantará leerte y compartir ideas contigo. Y si esta guía te ha inspirado, compártela para que más personas descubran el poder de bordar en lugar de comprar más ^^





